5 1828 Teatro Vauxhall o Parque Argentino

Se inauguro a mediados de 1828, hay autores que ubican la fecha en 1827, su entrada principal se ubicaba en Uruguay 750, ocupaba la manzana completa de Córdoba, Uruguay 750, ocupaba la manzana completa de Córdoba, Uruguay, Paraná y Viamonte (Del Temple en la nomenclatura de la época)

El perímetro del parque se rodeó de un cerco de cinco metros dentro de la línea de edificación para que los concurrentes pudiesen en ese espacio estacionar sus caballos y carruajes, ese retiro de la calle todavía se puede observar en la avenida Córdoba a la altura de Maipú.
Para llevar a cabo la obra se juntó un fondo de 100.000 pesos. La mayor parte de esa suma fue provista por comerciantes ingleses. La propiedad pertenecía a Santiago Wilde, quien en 1840 compró todas las acciones, volviendo a ser único dueño de lo que convirtió en su residencia particular.
Para esa época el parque ya había dejado de ser redituable, siendo una de las causas más importantes los frecuentes desbordes del arroyo Tercero del Medio, que atravesaba la actual calle Viamonte, dificultando el acceso.

Los jardines del paseo se arreglaban y cuidaban constantemente y para embellecerlos se importaron plantas y semillas extranjeras. Sin embargo, a pesar de la vigilancia, los paseantes robaban gajos a escondidas, que las mujeres escondían bajo pañuelos o polleras. 

Los encargados del paseo quisieron frenar esta práctica contratando un jardinero que les entregara a la salida ramos de flores, pero esta solución no fue suficiente. 

En el predio se encontraban las más variadas atracciones: un hotel francés, propiedad de Porch y Bernard, lujosos salones de baile y un circo para 1.5oo personas, donde actuaron los hermanos Podestá y asiduamente se ofrecian espectaculos de companias ecuestres como la de Smith. Recordemos que el nuevo genero del circo, era moda en toda Europa desde que lo presento por primera vez en Londres en 1779 Phillip Ashtley.
Además, había un teatro llamado Argentino, que durante el verano brindaba funciones por la tarde, entre ellos, Juan Aurelio Casacuberta.
Todas las tardes tocaba una banda de música y se exhibían animales exóticos, entre ellos, un tigre, un anta y un tapir.

La instalación del "Vaux-Hall" o Parque Argentino, implico una nueva modalidad en los gustos de la sociedad porteña, tenía un buen hotel, salones de baile y un teatro, la atracción principal consistía en un circo y las funciones podían también presenciarse desde mesas estratégicamente colocadas en los jardines. Se vieron allí los primeros traga fuegos, los primeros payasos e interesantes números de fuerza. Allí se introdujeron los bailes de pantomímicas que luego harían furor, este parque marca la época del florecimiento circense por sobre el teatro.

De acuerdo a lo expresado por el viajero inglés Arsene Isabelle, el paseo se encontraba bien mantenido pero, al estar lejos de las zonas más urbanizadas, era peligroso quedarse allí, hasta tarde. Se convirtió en leyenda que el deán Gregorio Funes, habitué del parque, fue encontrado muerto en el banco donde solía quedarse largos ratos.

Sin embargo, José Antonio Wilde, quien fue testigo de la muerte del déan, explicó después que el deceso sucedió repentinamente.

Este parque se demantelo en 1838.